Contar para existir: la necesidad humana de narrar. Escritor Chileno Alejandro Morales publica su libro. Sus historias no comienzan con “Érase una vez”, sino con “Hubo una vez un niño…”
Los niños de nadie, una obra publicada por Editorial Tintapujo Alejandro Morales y Los niños de nadie: una narrativa chilena que cuenta ya no desde la distopía sino desde el reencantamiento del mundo y su memoria. un cuento siempre cuenta dos historias y la historia secreta es la clave de la forma del cuento en esta obra, la originalidad de esta propuesta en palabras de Borges y Cortázar, no cuenta una historia externa, sino que habla sobre la necesidad humana de narrar. Desde la oralidad y la oraliteratura hasta el cuento contemporáneo, que celebra el relato como una forma de conocimiento y de emoción. Quizá estemos ante una metanarrativa en la obra Los niños de nadie. En cada relato sutil y estremecedor, el autor nos conduce por el camino de lo simbólico de una transformación. Lo que al principio parece un cambio físico —una piel que deja de ser blanca para tornarse negra como el carbón— pronto se revela como una metamorfosis más profunda: la oscurecida del alma, el inicio de una herida invisible, el descenso delicado pero inexorable hacia una forma de sombra que nadie alrededor alcanza a ver. Aunque pueda parecer obvio, en el cuento La niña que comenzó a oscurecerse la luz y la oscuridad no son solo elementos visuales, sino estados emocionales, metáforas de una sensibilidad que se resquebraja lentamente. La protagonista, que alguna vez se regocijaba con el canto de los pájaros y los anuncios de primavera, comienza a perder esa conexión con la alegría natural del mundo. El texto nos habla —sin decirlo del todo— de los primeros encuentros con el dolor, con el amor en su forma más ambigua, con aquello que germina en el silencio, como una raíz negra bajo la tierra fértil. Desde una mirada literaria, este cuento se inscribe en una tradición de realismo poético y simbólico, donde los cambios externos reflejan conmociones internas. La transformación de la niña no es castigo ni enfermedad, sino símbolo: un lenguaje alternativo para hablar de la pérdida de la inocencia, de la experiencia emocional que marca la entrada en una nueva etapa vital. La negrura que la invade no es racial ni social; es existencial, íntima, y silenciosamente devastadora. En el estilo profundamente sugerente de la narración en Los niños de nadie, no hay estridencias; cada cuento está cargado de resonancias, es un ejemplo poderoso de cómo la literatura puede dar forma a lo que no se puede decir en voz alta. Es una advertencia suave, un susurro oscuro: hay cosas que crecen sin ruido, y no por ello dejan de doler. En Los niños de nadie, los límites entre lo real y lo imaginario se disuelven para dar paso a una narrativa en la que la función poética, el pensamiento mítico y el compromiso social se entrelazan con fuerza y originalidad. Con esta obra, el autor Alejandro Morales reafirma su lugar como una de las voces más provocadoras e imprescindibles de la literatura contemporánea. El autor chileno Alejandro Morales presenta su más reciente libro de narrativa, Los niños de nadie, una obra que se sitúa en la vanguardia del pensamiento literario contemporáneo al proponer una profunda reflexión sobre un contexto donde la historia se percibe al borde de su disolución, Morales articula una visión donde lo mítico, lo surreal convergen. Lejos de la nostalgia por un pasado perdido, su narrativa se proyecta hacia un decontrucción de ese gran inicio del cuento clásico: “Érase una vez”, evocando un vívido sentir no como realización concreta, sino como narrador presente, como fuerza en movimiento que dejó de ser un “no-lugar” para convertirse en un horizonte posible, en un proceso narrativo-histórico-social del que aún poco se atreven a contar. Los niños de nadie recoge esta visión y la encarna en una narrativa desde lo real maravilloso con lo concreto. La obra sugiere que la transformación del mundo, ya sea social, artística o existencial, no puede separarse de la imaginación radical, de esa capacidad de ver la literatura como un mero acto de embellecer, sino de contar lo que nadie quiere leer. Contar para existir: la necesidad humana de narrar. Escritor Chileno Alejandro Morales Publica su libro, sus historias no comienzan con “Érase una vez”, sino con “Hubo una vez un niño…” Alejandro Morales (chileno) Nací en Santiago de Chile un soleado miércoles de febrero en 1977. Ese día, dejé el vientre de mi madre, el cual fue mi primer hogar, y recibí por herencia el nombre de mi padre, más no el azul de sus ojos. Comencé a crear historias antes de aprender a leer y me entretenía con ellas en las horas de juego durante la infancia. Luego, me he movido en la poesía desde que tomé un lápiz para escribir.Muchas historias de antaño, sin embargo, no quedaron por escrito. La sed de aprender, debuscar, me llevó a conocer autores maravillosos, escribir durante la época escolar, participar dealgunos concursos y realizar el Diplomado de Escritura Creativa en la UDP hace dos años.Tintapujo me abrió las puertas en su edición de microcuentos “Textículos” este 2025 y ahora, hallevado de la mano a estos “Niños de Nadie” por este nuevo camino que se me presenta. by Floriman Bello Forjonell (poémese)